69. Tulio

El tulio es otro elemento de la serie de los lantánidos o lantanoides, de los que hemos visto ya: Lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio y erbio, todos ellos con unas características muy parecidas entre sí, como ya sabrás si has leído alguna de las entradas anteriores. 

Comencemos pues con el elemento número 69 de nuestra querida Tabla Periódica. Como sabes, que sea el número 69 de la lista significa que su núcleo contiene 69 protones. Además, el 100% de los átomos de este elemento que se encuentran en la naturaleza tienen 100 neutrones. Estos elementos son estables. También se han creado isótopos de tulio en laboratorio, pero dichos isótopos son radiactivos, los más comunes con vidas medias de entre 10 días y 2 años. 

El tulio, ya lo comenté al hablar del holmio, fue descubierto por un sueco, Per Teodor Cleeve, a sus 39 años de edad. Dedicó mucho tiempo a estudiar las tierras raras, y experimentando con ellas, acabó obteniendo un compuesto marrón y otro verde. El marrón resultó ser óxido de holmio y el verde, de tulio. Holmia y Thule fueron los nombres elegidos por este gran químico. Thule, por la región donde se encontraba, ya que es el nombre latino de Escandinavia. El primero en ver algo de tulio puro, sin embargo, fue Charles James en 1911, un inglés que desarrolló un complicado método para aislarlo que, al menos durante un tiempo, fue conocido como el método James

Efectivamente, el tulio forma compuestos verdes. El que obtuvo Per Teodor era óxido de tulio, pero también forma diferentes sales de un color verde pálido. Como pasa con otros lantánidos, el tulio se utiliza para fabricar láseres (De hecho, son parecidos a los de holmio). Aprovechando la propiedad de la fluorescencia, también se utiliza para fabricar ciertos tipos de dosímetros (que miden la radiación) junto con sulfato de calcio, ya que los átomos de tulio emiten un pequeño destello de luz verde cuando les llega según qué radiación y éste destello puede ser registrado electrónicamente.  

Si cogemos una muestra de tulio y la bombardeamos con neutrones, los átomos de tulio 169 pasarán a ser Tm170, que tiene una vida media de 128.6 días. Este isótopo emite radiación gamma con una longitud de onda similar a la de una fuente de rayos X de laboratorio, con lo que tiene ciertas aplicaciones en este campo, tanto industriales (medida de espesores, por ejemplo) como médicas (tratamiento de tumores). No es muy común, pero ahí está.  

Y tampoco te creas que este raro metal da para mucho más. Es muy escaso (el más escaso de los lantánidos, junto con el lutecio), y bastante caro. Ten en cuenta que aunque digo que es muy escaso, hay más tulio en la Tierra que oro o platino, por ejemplo, pero ya sabes que como “tierra rara” que es, está siempre muy mezclado con otros elementos y es complicado y caro extraerlo y aislarlo. Por cierto que a estas alturas no hace falta que diga qué país tiene más reservas de tulio… sí, es China. 

Respecto a algunos otros usos, se utiliza, por ejemplo, como no podía ser de otra manera, para fabricar ciertos imanes, superconductores (junto con itrio) o incluso, he leído, puede que también aparezca en los billetes de euro.

Se sigue experimentando con este material, como se sigue haciendo con el resto de tierras raras y se les va encontrando prometedoras aplicaciones, así que como hay "poco", muchos los consideran materiales clave para la economía. Habrá que estar al tanto.

  

Thulium sublimed dendritic and 1cm3 cube.jpg
Tulio puro. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario