Con el lantano comenzamos un
nuevo bloque de la Tabla Periódica: Los lantánidos (o lantanoides, como algunos
se empeñan en nombrar). Los lantanos también son llamados, en ocasiones,
Tierras Raras, como el itrio o el escandio, elementos que ya vimos en su día y
donde aproveché para explicar ese concepto. En la Tabla Periódica, los lantánidos
aparecen generalmente en un pequeño grupo apartado de 15 elementos con
propiedades similares, tanto, que cuesta muchísimo separarlos y aislarlos a
partir de las rocas en las que se encuentran.
El lantano, con sus 57 protones
en el núcleo y su color metálico más o menos brillante (como el resto de
lantanos) es el más pequeño del grupo. También cuenta, como sabrás, con 57
electrones en su corteza. El tema es que en este caso (como en el del resto de
lantanos) los electrones están distribuidos de una forma un tanto particular. El
electrón número 57 no se añade en la última capa, como cabría esperar, si no en
un nivel interno conocido como orbital f. Como sabes, los electrones de la
última capa suelen determinar muchas propiedades de los elementos químicos, y así
lo harán los dos electrones de la Capa de Valencia de los lantanos, pero ese
orbital f, que parecía poca cosa, les va a dotar de unas características
especiales muy interesantes: fluorescencia, magnetismo o capacidad para generar
compuestos de vivos colores.
Solo por dejar claro el tema de
la distribución electrónica: En el caso concreto del lantano, los 57 electrones
están distribuidos de la siguiente manera: 2, 8, 18, 18, 9, 2. Esto es extraño,
porque si el anterior elemento, el bario, tenía los electrones distribuidos así:
2, 8, 18, 18, 8, 2, lo lógico sería pensar que el lantano debería ser 2, 8, 18,
18, 8, 3. Pero no. Así de caprichosos son los Lantánidos.
Y por cierto, en el 99´91% de los
casos, el lantano tiene 82 neutrones, siendo Ln139. Casi en el resto de los
casos es Ln138, un isótopo radiactivo con una vida media de 100.000.000.000
años.
El lantano lo descubrió en 1839 un
sueco llamado Carl Gustaf Mosander, un farmacéutico, cirujano y profesor de
química (entró de profesor sustituyendo al que había sido el suyo: Berzelius,
uno de los más grandes químicos de la historia y descubridor del torio, el
cerio y el selenio). Mosander descubrió, además del lantano, otros dos elementos
y medio: el erbio, el terbio y el didimio (este último es el que cuento como medio
porque, aunque al principio se le consideró como un nuevo elemento que después
resultó ser la mezcla de neodimio y praseodimio). Mosander nombró a su nuevo
elemento lantano (nombre sugerido por Berzelius) por provenir de lanhanein, que
significa “oculto” en griego, lo cual es indicativo de la dificultad para
encontrar estos elementos. De hecho, no pudo ser aislado hasta 1923, y el
mérito se lo llevaron dos rusos: H. Cremers y R. Stevens, que lo hicieron
mediante electrólisis.
Monazita, un bonito mineral compuesto por lantano y cerio, entre otros. |
Quizás una de las primeras
aplicaciones del lantano fue la de formar parte de una aleación llamada mischmetal,
con la que se fabrican las piedras de los mecheros. El mischmetal es una mezcla
de hierro con varios lantánidos, entre ellos el lantano, el cerio o el neodimio.
Un puñado de trozos de mischmetal. |
En la actualidad, las baterías es su principal aplicación. Se utiliza una mezcla de lantano y otros elementos en las baterías de NiMH de los coches, llegando a utilizar, por ejemplo, hasta 10 kilogramos para el Toyota Prius.
El lantano (en su forma de óxido)
también se utiliza para fabricación de cristal, sobretodo para vidrios
especiales, como los de las gafas de visión nocturna o algunos telescopios o
cámaras.
También se utiliza (las sales de
lantano) como catalizador en algunas reacciones en la industria petrolera.
Respecto a su toxicidad, lo más
recomendable es no respirarlo, porque puede fastidiarte los pulmones. El
lantano es bastante reactivo y reacciona con el agua generando hidrógeno y
bueno, ya sabes, no conviene mezclarte con elementos así. Que explotan. Sin
embargo, el lantano se puede utilizar para algunos tratamientos de cáncer (en
su versión de isótopo radiactivo) y se suministra como fármaco (Foresnol) en su
forma de carbonato de lantano, aplicado para pacientes con insuficiencia renal,
ya que disminuye la concentración de fósforo en la sangre (el lantano, separado
en los intestinos e inyectado en la sangre, tiene gran afinidad por este
elemento). La sal La(PO4) se elimina fácilmente del cuerpo con lo que tampoco
puede suponer un problema.
La bastnasita, preciosa gema rojiza con hasta un 38% de lantano. |
oe que informacion me encanta
ResponderEliminarGracias!
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